25.4.10

Doble vida

Acaso la felicidad sea hacer las cosas despacio y con la conciencia de hacerlas también para los demás, de que aunque no estén contigo están viviendo y sintiendo de algún modo lo que haces y cómo lo haces, y así apreciarán tus ganas o tus prisas, tu calma o tu alegría y vivir será algo un poco más lleno de sentido porque no será un gesto solitario sino un auténtico vivir para los otros, un vivir multiplicado y compartido.